La importancia de la postura y su relación con el ánimo.
Normalmente no prestamos atención a la postura que mantenemos a lo largo del día. Venga a reconocerlo, ahora quizá estés encorvado o hecho un cuatro en el sofá. Pero la postura, cómo está nuestro cuerpo y nosotros, también se manifiesta en la forma de colocarnos, de estar de pie, en definitiva en la postura. Fijaos en los deportistas que consiguen sus objetivos, en los que se fijan determinadas metas y las van logrando por pequeñas que sean, su mirada es firme, su postura es correcta, espalda recta, hombros alineados... En cambio cuando ves a una persona deprimida o con una mala época, solemos ver que sus hombros están caídos, mirada hacia el suelo, espalda curvada, todo lo opuesto. El desánimo se manifiesta en nuestro cuerpo y en la forma que tenemos de estar, de andar, de sentarnos, de vivir. El cuerpo nos habla constantemente, y lo triste es que muy pocas veces le escuchamos, también porque no se nos ha enseñado a hacerlo. El yoga es una de esas maravillas que nos permi