MasKYoga - Terapias Naturales (yoga, Meditación, masajes, bienestar)

Llega el último día del año y, como viene siendo una tradición para mi misma, aprovecho a hacer un repaso del mismo. Me he dado cuenta que se ha convertido en una limpieza interior, un borrón y cuenta nueva, como normalmente hago, por medio de la escritura. Comenzaba el año estando casi 5 meses de baja, una vez superados los horribles primeros tres meses (últimos del 2012) seguía sin poder con mi cuerpo, convirtiéndose una frase hecha, en una dura realidad para mi. Hay ciertas cosas que dejan de importarte.  En ocasiones ha hecho que me convirtiera en un ogro y transformarme en un ser oscuro lleno de enfado, este año bastante más cercano a una gran tristeza y miedo.  Ahora entiendo un poco mas porqué me ha tocado, a base de trabajo interior y mucho análisis que necesitaba para poder seguir adelante. Muchos de los que quiero siguen sin entenderme ni apoyarme como a mi me gustaría o pido, eso también he aceptado que así va a ser porque ni yo voy a ir con la cara desencajada

Pasé una tarde de regalo con dos grandes personas, que la vida ha sido tan generosa de poner en mi camino. Y es el momento ideal para reflexionar sobre los regalos, época de ¡ arriba el consumismo! donde pasamos a querer "premiar" a nuestros seres queridos por esa vivencia en común, por ese querernos durante todo el año y con la excusa de navidades aprovechamos para darnos esos caprichillos, ¿verdad? Pero vayamos por partes. Creo que es de rigor empezar hablando de necesidades básicas, éstas son: comer diariamente al menos 3 veces al día, contar con un sitio donde poder cobijarte cuando es necesario y poder disponer de la ropa imprescindible para cada estación de año. Básicamente: comer, beber, dormir, tener un techo y disponer de ropa para protegerse. Fuera de todo eso el resto son caprichos, vamos, que no son necesidades. Si, así es amigos, un smartphone es un capricho. Para comunicarte con los demás no necesitas el teléfono de última generación, los bare